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Los problemas de salud ocasionados por la comida chatarra no sólo se deben a los ingredientes que contienen y ocasionan enfermedades, también puede ser por unos compuestos químicos que se usan en las envolturas/empaquetado. Ese el caso de los cancerígenos llamados perfluorados o compuestos C-8 que se usan en el material de empaque de alimentos como la pizza, el “popcorn” para micro ondas, y otros alimentos chatarra y, que incluso están en contacto directo con el alimento.

Parece que la industria ha planteado voluntariamente eliminar el uso de algunos de estos perfluorados solo en empaque de alimentos, pero en parte se debe a las campañas de denuncia del EWG (siglas en inglés del Grupo de Trabajo Medioambiental) una ONG de EEUU.

La FDA (siglas en inglés para la Administración de Drogas y Alimentos) ha anunciado que cinco de estos compuestos ya no van a ser vendidos para ser aplicados al material de empacado de alimentos. Uno de los más notables es el ácido perfluorooctanóico o PFOA porque se ha encontrado en la sangre del 98% de la población estadounidense, está presente en la cadena alimenticia, contamina el medio ambiente y está relacionado a una serie de efectos perjudiciales a la salud. En Abril un panel científico independiente fue aprobado para la compañía Dupont como parte de un juicio por que se ha relacionado al PFOA con el cáncer al riñón y testicular en humanos.

Ya en el 2005, la EPA (siglas en inglés de la Agencia de Protección de Medio Ambiente) había multado a DuPont con 10 millones de dólares, una de las multas más grandes en la historia relacionadas al envenenamiento del medio ambiente, por haber ocultado el hecho de que el PFOA ocasiona enormes riesgos para la salud.

Las compañías que manufacturan sustancias químicas no están alertando al público acerca de los daños de estos compuestos. Peor aún, a veces se reemplazan por otras sustancias químicas alternativas peores una vez que se empiezan a conocer sus daños.

Al PFOA se le llama C-8 porque tiene 8 átomos de carbono. Otra sustancia química clave y alternativa llamada ácido perfluorohexanóico (PFHxA) contiene 6 átomos de carbono. La industria química nos quiere hacer creer que quitarle dos carbonos no ocasiona riesgos. Pero se sabe que los C-6 son persistentes en el medio ambiente, traspasan la placenta contaminando a los bebés aun antes de nacer, de manera que son de 3 a 5 veces más tóxicos que los C-8 en todo organismo acuático.

Una revisión de EWG de las evaluaciones de seguridad de la FDA para ocho sustancias químicas fluorizadas usadas en materiales de empacado de alimentos, encontró evidencia de que la FDA en realidad no ha evaluado adecuadamente la exposición de las personas a los compuestos C-6.

“Las agencias de salud deberían están investigando más allá del empaquetado para ver el uso general de estos preocupantes compuestos”, dijo Renee Sharp miembro científico del EWG y agregó: “Hasta que la conducta de la manufactura no sea transparente, a través de análisis de seguridad de estos materiales, no podemos (ni debemos) confiar en las sustancias químicas alternativas que se hacen pasar por verdes”.