Read article by WILLIAM NEUMAN from The New York Times here
Cada año, inspectores federales encuentran niveles ilegales de antibióticos en cientos de vacas lecheras listas para el matadero. Preocupados porque estos antibióticos puedan contaminar la leche que los estadounidenses toman, la Administración de Drogas y Alimentos (FDA siglas en Inglés) intentará iniciar pruebas de la leche este mes a las ganaderías que repetidamente venden vacas contaminadas con residuos de antibióticos.
Pero este plan enfrenta airadas protestas de la industria lechera, que alega que esto obligará a los ganaderos a tirar millones de galones de leche innecesariamente mientras aguardan por los resultados. Oficiales de la industria y reguladores del estado dicen que el programa ha sido inadecuadamente concebido y puede ocasionar costosos retiros del mercado que podrían ser evitados con un mejor plan de pruebas.
En respuesta la FDA pospondrá las pruebas y ahora los dos lados están en disputa acerca de cuanto daño causan los antibióticos y la mejor manera de asegurar que los antibióticos no terminen en la leche.
“Para lo único que la FDA ha servido hasta ahora ha sido potencialmente muy dañino para los inocentes ganaderos” dijo John J. Wilson, vice presidente de los Ganaderos Lecheros de EEUU, la cooperativa más grande de la nación. Él dijo que la leche de EEUU es segura y que hay pocas razones para creer que las pruebas de los mataderos arrojen los mismos resultados en la leche.
Pero defensores de la seguridad alimentaria dicen que las pruebas preliminares de la FDA genera preocupaciones acerca del posible sobreuso de antibióticos en el ganado, lo que se teme pueda menoscabar la efectividad de estas mismas medicinas cuando se usan para combatir enfermedades humanas.
“Ciertamente los consumidores no quieren tomar pequeñas dosis de antibióticos cada vez que toman leche” dijo Caroline Smith DeWaal, directora por la seguridad alimenticia del Centro por Ciencias en Interés Público, un grupo defensor. “Ellos desean productos que estén adecuadamente manejados para asegurarse de que no hay residuos, y el ganadero es el que puede controlar esto”.
La F.D.A. dijo que discutiria esto con la industria antes de decidir como proceder. “La agencia está comprometida a obtener la información necesaria para atender su preocupación con respecto a este importante asunto de salud pública” dijo en un comunicado.
Las preocupaciones de los reguladores federales emanan de pruebas hechas por el Departamento de Agricultura en vacas lecheras trasladadas a los mataderos. Por años las pruebas han arrojado poco pero persistente número de animales con residuos de drogas, mayormente antibióticos, los que violan los límites legales.
Pruebas han encontrado 788 vacas con violaciones (residuos) en el 2008, el año más reciente en que hay datos disponibles. Esta es una mínima fracción de los 2.6 millones de vacas que se matan cada año, pero los reguladores dicen que las violaciones son apenas avisos, pues las pruebas persisten de año en año, y algunas de las drogas que se han detectado no han sido aprobadas para ser usadas en las vacas lecheras.
Las interrogantes para la FDA es si estas vacas que producen leche también tienen niveles ilegales de estas drogas en sus cuerpos y si residuos de estas pueden estar contenidos en la leche.
Reguladores y veterinarios dicen que altos niveles de estas drogas pueden persistir en el sistema del animal debido al mal uso de medicinas en las ganaderías.
Esto puede incluir el exceso en las dosis o el inyectado de la droga en el musculo en vez de las venas. Problemas también pueden ocurrir si los ganaderos no cumplen con las normar que requieren que se espere un numero especifico de días después de la administración de las drogas antes de trasladar el animal al matadero o de usar el animal en la producción de leche.
“La F.D.A. está preocupada porque estas deficientes prácticas de manejo que causan residuos en la carne puedan también resultar en residuos de estas drogas en la leche”, dijo la agencia en un documento donde explica su plan para la industria. En el mismo documento, la FDA dijo creer que la leche de la nación es segura.
Hoy, cada carga de leche es inspeccionada por 4 a 6 antibióticos que comúnmente se usan en la ganadería. La lista incluye penicilina, ampicilina, lo que también se le prescribe a las personas. Cada ano, solo un pequeño número de esta carga de “leche caliente” contiene residuos de antibióticos. En estos casos la leche se destruye.
Pero los ganaderos usan mucho más drogas, las mismas para las que no se realizan pruebas en la leche. Reguladores están preocupados pues algunas de esas otras drogas han sido encontradas en las pruebas de los mataderos.
Oficiales federales han planteado expandir las pruebas por años. Pero los ejecutivos de la industria dicen apenas ha sido hace un mes que la FDA les ha comunicado que finalmente empezarían las pruebas.
La agencia dice que planea hacer pruebas en la leche de alrededor de 900 ganaderías lecheras que repetidamente envían vacas al matadero con ilegales niveles de las drogas en sus sistema.
Dijo que hará pruebas para una docena de antibióticos, además de los seis típicamente usados. Las pruebas también buscarían analgésicos y una droga anti-inflamatoria de uso popular en las ganaderías, llamada flinixin, la misma que se ha encontrado en las pruebas en los mataderos.
El problema, desde el punto de vista de la industria, es el tiempo que se toma en obtener los resultados. Las pruebas que se realizan actualmente para los antibióticos en la leche toman minutos. Pero las nuevas pruebas podrían tomar una semana o más para determinar si las drogas están presentes en la leche.
La leche se moviliza rápidamente a las tiendas o a las fábricas que producen queso u otros productos. La industria está preocupada porque bajo el plan de la FDA, cuando la leche se encuentre que está contaminada ya pueda estar en las refrigeradoras de los consumidores y esto puede ocasionar retiros del mercado
Una cooperativa del Noreste, Agri-Mark, envió una carta a sus miembros el mes pasado para instruirles que destruyan toda leche que sea sometida a pruebas por la FDA. “Agri-Mark debe asegurarse que todas las ventas de leche, queso, mantequilla y otros productos no están en peligro de ser retirados del mercado” dice la carta.
Otros ejecutivos de la industria dicen que las plantas procesadoras podrían rehusar la leche de granjas que sean inspeccionadas hasta que los resultados muestren que realmente están libres de drogas, lo que significa que los ganaderos tendrían que desechar la leche por una semana o más mientras se esperan los resultados.
El plan de la F.D.A. ha sido también criticado por los oficiales del estado que regulan la industria lechera.
En una carta incisiva de fecha Diciembre 29, prominentes oficiales de10 estados del Noreste, que incluyen Nueva York y Pennsylvania, ambos líderes productores de leche, dijeron a la FDA que el plan es bastante defectuoso. Entre otros problemas dice la carta, el forzar a que los ganaderos desechen grandes cantidades de leche puede crear problemas de medio ambiente.
La FDA dijo que considerará los comentarios de los reguladores en la revisión de su plan de pruebas.